La fiesta del Papa en Benín se ha terminado,
ahora hay que ponerse manos a la obra para trabajar por
la reconciliación, la justicia y la paz como Federico y
Gregorio.
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Centro
Brésillac de Calavi |
"El Papa se marchó
y la fiesta terminó"
Me encuentro cada día con
gentes responsables que se esfuerzan en hacer el trabajo
lo mejor posible. También he sido testigo de gestos solidarios
de dar ayuda a los más desfavorecidos. Admiro la capacidad
de mucha gente corriente que no baja los brazos en las dificultades
si no que luchan a diario, me quedo sorprendido de la alegría
que se manifiesta aunque ven el futuro difícil. Y estoy
impresionado por todos los voluntarios que realizan un trabajo
gratuito.
Para ilustrar lo que digo
y pienso, os hablaré de Federico de 45 años que dejó
su trabajo para ocuparse de chicos de la calle desde hace
10 años de acuerdo con su esposa que trabaja en un banco.
¿No deja de sorprender tanta generosidad? Pienso también
en Gregorio un beninés que ha montado centros de salud para
acoger a enfermos mentales. Trabaja después de bastantes
años para que se reconozcan a los enfermos como personas
normales. Sorprende a todos que con su trabajo a veces pueda
reintegrar a los enfermos que antes estaban excluidos. Gregorio
es un hombre impresionante, pues comenzó este trabajo sin
ninguna formación. Su antiguo empleo era arreglar neumáticos.
Él no se explica cómo ha llegado a realizar todo
este trabajo, pero no deja de decir que el amor hace milagros.
¿Cómo no tener esperanza cuando hay gente de esta calidad?
Estos enlaces que os presentamos
a continuación, nos permiten ver un reportaje sobre
el trabajo de Grégoire con los enfermos mentales:
Video
1
Video
2
Hace cuatro años que estoy
en el Centro Brésillac de Calavi. Este año tenemos 32 seminaristas
que se preparan para ser misioneros S.M.A. Vienen de 10
países de África y de Polonia. Como otros cursos muchos
de ellos llegan sin el dominio de las dos lenguas que hablamos
en el Centro, inglés y francés. Antes de finalizar
el curso la mayoría de ellos hablarán y leerán en los dos
idiomas y seguirán estudiando la ortografía.
Un compañero indio muy simpático
ha venido a formar parte de nuestro equipo de formación.
Al final estamos 14 nacionalidades distintas. Pero todo
ha comenzado bien y poco a poco vamos haciendo comunidad.
André Moriceau, SMA. |